Durante 2014 las detenciones de manifestantes iniciaron a la par de las protestas estudiantiles, cuando un grupo de estudiantes de la ULA realizaron acciones de calle para denunciar el intento de violación de una joven, la manifestación fue reprimida por los organismos de seguridad, y dos estudiantes resultaron detenidos, aunque fueron liberados al día siguiente. Dos días después se llevo a cabo otra protesta estudiantil, durante la misma los manifestantes se reunieron a las afueras de la casa del Gobernador del Táchira, donde exigían mayor seguridad, sin embargo se caldearon los ánimos y la misma se torno violenta, dejando un saldo de 4 personas detenidas.
Estas detenciones generaron mayor solidaridad en el resto de la comunidad universitaria, por lo que se planificaron manifestaciones para los días 9 y 11 de febrero, siendo algunas de ellas reprimidas, motivando a la organización de protestas nacionales en conmemoración del día de la juventud, cuyo violento desenlace movió a la ciudadanía a realizar aún mas acciones de calle. El total de detenidos según el monitoreo de este período, aumentó casi cinco veces con respecto al mismo período del año 2013, registrando un incremento de 494%.